
Sin dudas el álbum que me explicó lo que es la versatilidad en el rock, el poder, el peso de las guitarras, la pureza, la simpleza y la complejidad mezcladas majestuosamente. La prolijidad, la sabiduría y la calidad. Un disco inspirado, de lírica confusa y mejorable, con la polifonía como marca diferencial, A Night At The Opera de Queen fue editado en 1975 con obras de todos los integrantes de la banda.
En un tiempo sabía, de memoria, cada golpe en la batería (aunque se me complicaba en Sweet Lady) y hoy sigo descubriendo coros imperceptibles (con ayuda de la versión en 5.1). Es el disco que más veces tengo, la versión americana del 91, la de EMI, una en DVD doble, una aniversario y hasta una edición de oro de 24 kilates (podemos negociar a quien le interese).
A rockear. Mi disco.